Seguramente usted ha escuchado en repetidas ocasiones la frase “somos lo que comemos” pero son pocas las personas las que realmente reflexionan sobre ella y hacen consciencia acerca de su significado. Porque comer una hamburguesa, un hot dog, beber una gaseosa o comerse un delicioso pastel parece ser inevitable en la mayoría de los casos.
Ha notado usted que en la actualidad las enfermedades que mas aquejan a los jóvenes son la anorexia, la bulimia, la anemia y la desnutrición, entre otras. Que las personas entre los 50 y los 70 años se caracterizan por sufrir de diabetes, hipertensión, insuficiencia renal, problemas respiratorios, coronarios, vasculares, cáncer, entre otros. O quizás se ha percatado que la obesidad pasó de ser un problema estético a una enfermedad que ha cobrado vidas.
Pruebas científicas han demostrado que la mayoría de esas enfermedades se deben al tipo de dieta que los individuos que las padecen han llevado a lo largo de su vida. Dado que según los investigadores, una buena alimentación es aquella que proporciona equilibradamente los nutrientes, proteínas y carbohidratos que el cuerpo necesita para su buen funcionamiento.
Una persona que tiene como principales elementos de su dieta los cereales, los vegetales y las frutas será alguien que mantendrá sano, enérgico, desintoxicado y con capacidad para enfrentarse a los continuos factores de contaminación ambiental, epidemias, virus y demás bacterias que se encuentran a diario en todo lugar.
Al contrario de una persona que tiene una dieta basada en carne de cerdo, harinas, dulces, sal y todo tipo de grasas de origen animal. Que son por lo general personas que no solo mantienen presentando síntomas de enfermedades y las mismas como tal. Son personas que tienden a la obesidad, que se fatigan rápidamente, que viven con sueño, pereza y con toda clase de virus porque no están bien nutridos y su cuerpo esta susceptible a cualquier cambio climático o epidemia.
Alimentarse bien no solo ayuda en la curación de las enfermedades sino que las previene. ¿por qué esperar a sufrir de diabetes para eliminar los azucares? ¿Por qué esperar a sufrir de los riñones para eliminar la sal y tomar más líquido? ¿Por qué esperar a tener un pre infarto o infarto para dejar de consumir colesterol?
Somos lo que comemos, nuestra salud y bienestar depende de nuestra alimentación. Cada quien es responsable de su vida.
lunes, 5 de octubre de 2009
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